La Cámara de Diputados bonaerense insiste a través de una iniciativa aprobada, para que el gobierno de la provincia de Buenos Aires dé cuenta del estado de situación del Servicio Alimentario Escolar (SAE).
El proyecto del diputado bonaerense de la UCR, Juan Gobbi, pide especificar el mecanismo a partir del cual se determina la suma de 3 pesos por alumno y por almuerzo, asignado actualmente al Servicio Alimentario Escolar, y si éste valor se ajusta a la variante inflacionaria.
Además, se solicita determinar la modalidad o parámetros técnicos por medio de los cuales se establece la cantidad de raciones; y pregunta si se analizó la implementación de un sistema de tickets para la compra de verduras y carne a través de convenios con supermercados.
Por último, el gobierno bonaerense deberá determinar sí existen convenios vigentes con las Universidades de la Plata y Quilmes con el objeto de conseguir los elementos de juicio para una apropiada dieta de los alumnos en los diferentes comedores de la provincia de Buenos Aires.
El vicepresidente III de la Cámara joven explicó, “debido a la crisis económica-social que atraviesa nuestro país, de un tiempo a ésta parte las instituciones educativas y sus miembros, se han visto obligadas a proporcionar servicios que exceden a sus funciones naturales destinadas a brindar educación”.
“La escuela hoy constituye el tejido de contención principal de los sectores más postergados de la sociedad, descuidando su prioritaria función, pero es una realidad que el rol contenedor suple la ausencia del Estado que no puede garantizar la satisfacción de las necesidades primarias de buena parte de los argentinos sumidos en la pobreza y la indigencia”, agregó Gobbi.
El legislador de la quinta sección electoral aseveró que el servicio de comedor “cubre entre 400 y 410 mil cupos, con una inversión de 3 pesos cada uno”, y advirtió “quienes se encuentran en la responsabilidad de administrarlos, aseguran que los cupos se encuentran mal distribuidos y que el dinero destinado a cada uno es insuficiente para garantizar una ración razonable en cantidad y calidad nutricional”.
“Cada Consejo Escolar – prosiguió - administra los cupos que se le asignan para distribuirlos y deben controlar la calidad de los alimentos; al encontrarse descentralizado éste sistema en cabeza de los Consejeros, se dificulta el control sobre la sinceridad en los cupos y la calidad de los productos con los que se elaboran las comidas”.
“El desfasaje que existe entre los cupos reales y los declarados, ha servido al gobierno provincial para excusarse por el recorte de cupos de un 30 % realizados en éste año, pero la realidad nos cuenta que la verdadera razón por la cual se restringe el acceso a la alimentación en la escuela, es la deuda con proveedores del SAE”, denunció el legislador radical.
Finalmente, el diputado Gobbi destacó los recursos que brindan la Universidad Nacional de Quilmes y la Universidad Nacional de La Plata, “ya que es de público conocimiento la elaboración de al menos dos productos que ayudarían a palear ésta problemática que presenta la Provincia, teniendo en cuenta que es indispensable acordar la manera en que se puedan elaborar alimentos ricos en nutrientes y a bajo costo”.
El proyecto del diputado bonaerense de la UCR, Juan Gobbi, pide especificar el mecanismo a partir del cual se determina la suma de 3 pesos por alumno y por almuerzo, asignado actualmente al Servicio Alimentario Escolar, y si éste valor se ajusta a la variante inflacionaria.
Además, se solicita determinar la modalidad o parámetros técnicos por medio de los cuales se establece la cantidad de raciones; y pregunta si se analizó la implementación de un sistema de tickets para la compra de verduras y carne a través de convenios con supermercados.
Por último, el gobierno bonaerense deberá determinar sí existen convenios vigentes con las Universidades de la Plata y Quilmes con el objeto de conseguir los elementos de juicio para una apropiada dieta de los alumnos en los diferentes comedores de la provincia de Buenos Aires.
El vicepresidente III de la Cámara joven explicó, “debido a la crisis económica-social que atraviesa nuestro país, de un tiempo a ésta parte las instituciones educativas y sus miembros, se han visto obligadas a proporcionar servicios que exceden a sus funciones naturales destinadas a brindar educación”.
“La escuela hoy constituye el tejido de contención principal de los sectores más postergados de la sociedad, descuidando su prioritaria función, pero es una realidad que el rol contenedor suple la ausencia del Estado que no puede garantizar la satisfacción de las necesidades primarias de buena parte de los argentinos sumidos en la pobreza y la indigencia”, agregó Gobbi.
El legislador de la quinta sección electoral aseveró que el servicio de comedor “cubre entre 400 y 410 mil cupos, con una inversión de 3 pesos cada uno”, y advirtió “quienes se encuentran en la responsabilidad de administrarlos, aseguran que los cupos se encuentran mal distribuidos y que el dinero destinado a cada uno es insuficiente para garantizar una ración razonable en cantidad y calidad nutricional”.
“Cada Consejo Escolar – prosiguió - administra los cupos que se le asignan para distribuirlos y deben controlar la calidad de los alimentos; al encontrarse descentralizado éste sistema en cabeza de los Consejeros, se dificulta el control sobre la sinceridad en los cupos y la calidad de los productos con los que se elaboran las comidas”.
“El desfasaje que existe entre los cupos reales y los declarados, ha servido al gobierno provincial para excusarse por el recorte de cupos de un 30 % realizados en éste año, pero la realidad nos cuenta que la verdadera razón por la cual se restringe el acceso a la alimentación en la escuela, es la deuda con proveedores del SAE”, denunció el legislador radical.
Finalmente, el diputado Gobbi destacó los recursos que brindan la Universidad Nacional de Quilmes y la Universidad Nacional de La Plata, “ya que es de público conocimiento la elaboración de al menos dos productos que ayudarían a palear ésta problemática que presenta la Provincia, teniendo en cuenta que es indispensable acordar la manera en que se puedan elaborar alimentos ricos en nutrientes y a bajo costo”.